Noroeste
Jujuy, Salta, Catamarca y Tucumán combinan magníficos atractivos naturales con el vestigio de culturas precolombinas.
En esta región se superponen varias capas de la historia argentina: comunidades aborígenes locales fueron absorbidas con la expansión del imperio inca, luego destronado por la corona española, finalmente rechazada en la guerra de la independencia. Ruinas, museos y edificios repasan cada una de estas etapas.
Al mismo tiempo, el mestizaje de las profundas raíces indígenas con la cultura europea se expresa en el estilo de vida, la música, el arte, las ceremonias, los coloridos mercados y la exquisita gastronomía.
La diversidad de paisajes también caracteriza al Noroeste. Desde las planicies del Gran Chaco, la precordillera asciende dramáticamente con profundos valles transversales, cañadones y quebradas. En el centro, las densas Yungas dan paso a valles recluidos y cerros multicolores cubiertos de cardones.
Continuando hacia el Oeste, el tiempo parece detenerse en la altura de la Puna. El azul diáfano del cielo contrasta con la negrura de los campos de lava y el brillo de las salinas y picos nevados.
Al pie de los silenciosos volcanes, manadas de guanacos y vicuñas se amalgamas con el horizonte infinito de este vasto vacío.